Si como propietario de algún bien, alguna vez has tenido que lidiar con alguna emergencia de plomería de alguno de tus inquilinos en pleno día festivo, entonces es probable que te interese saber que existe algo llamado Property Management y cómo puede ser tu aliado inmobiliario.
Ser propietario y generar ingresos sobre los inmuebles es una fuente de inversión asegurada y generalmente muy rentable, pero también conlleva mucha responsabilidad y muchos inconvenientes si no estás asesorado adecuadamente. Invertir en una propiedad es un gran paso, y tener que enfrentar a inquilinos descuidados y emergencias durante todo puede ser un problema.
El Property Management (PM) es la persona que lleva a cabo las diferentes labores que conforman la gestión de una propiedad: desde la búsqueda y selección de inquilinos, promocionándolo en portales o anuncios, el mantenimiento del inmueble, gestión de documentos, atención y solución de inconvenientes y comunicación constante entre inquilino y propietario.
Contar con la gestión de un PM es la solución perfecta para asegurarse de que sus propiedades inmobiliarias obtengan ganancias y se mantengan en las mejores condiciones posibles.
¿Por qué contar con un Property Management?
- Inquilinos de calidad: Un administrador con experiencia real y conocedor en su área, tendrá la capacidad para detectar quién es o no un buen inquilino. Seleccionando el perfil más adecuado para su propiedad y que le asegure una estancia duradera, lo que se transforma en ahorro de dinero.
- Ciclos de desocupación menores: La experiencia de un asesor te indicará qué actualizaciones o renovaciones valen la pena hacer en tu inmueble. Este conocimiento asegurará que mantengas a tus inquilinos año tras año y paguen lo que vale realmente la propiedad. Incluso logres recibir referidos si tus actuales inquilinos deban desocupar la propiedad.
- Administración de inquilinos: Están presentes desde la búsqueda y selección de inquilinos hasta el cobro de alquileres y el manejo de quejas, estos administradores de propiedades se encargan de todo lo que conlleva el otro lado del negocio, que en ocasiones no resulta tan fácil de hacer y te ahorrará tiempo.
- Mantenimiento y reparaciones: Un administrador de propiedades no solo resolverá todos estos pequeños problemas para que no tengas que hacerlo usted, sino que también se asegurará de contar con proveedores de calidad y confiables, que realicen las reparaciones a un precio justo.
- Asistencia con impuestos: Esta persona será tu aliado para ayudar a comprender qué deducciones puedes reclamar, así como a organizar los formularios y la documentación necesarios para realizar dichos reclamos.
Beneficios personales para los propietarios
Todas estas ventajas se traducen en menos estrés, mayor libertad y ahorro de tiempo. Estos resultados se pueden lograr con la contratación de personas calificadas para ello, que sean competentes, confiables y se adapte bien a tu propiedad. Anímate a delegar tareas y ahorra tiempo de calidad para invertirlo sabiamente en tu día a día.
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